Opiniones de los clientes
«Estamos totalmente convencidos del nuevo sistema AirScrape. El AirScrape mantiene nuestros puntos de transferencia libres de polvo y derrame de materiales, durante más tiempo que los faldones laterales convencionales. No es necesario realizar trabajos de mantenimiento y limpieza, es decir, el AirScrape se ha rentabilizado rápidamente. Ya hemos convertido el segundo punto de transferencia y vamos a hacer lo mismo con otros»
Peter Skrzypczyk
«Fuimos los primeros en poder probar el AirScrape. ¡Actualmente, el AirScrape ya lleva 3 años funcionando sin problemas en nuestras instalaciones todos los días y con cualquier carga! Hasta ahora, el AirScrape consigue que el material se transporte en la cinta de manera limpia y sin polvo. Y no hay ninguna razón para dudar de que seguirá haciéndolo durante muchos años»
Ronald Lehmann
Director del área de ingeniería de sistemas
«Descubrí por primera vez el AirScrape en 2016 en la feria Schüttgut de Dortmund, y enseguida me convenció su principio de funcionamiento. Lo pedí directamente en la feria y al cabo de unas semanas ya estaba instalado en nuestros puntos de transferencia problemáticos. Después de montarlo desaparecieron las grandes cantidades de polvo y los derrames de material habituales. Ahora, tras más de 6 meses de uso, todavía no se observa ningún signo de desgaste. El AirScrape resulta convincente de principio a fin. ¡Le ponemos un 10!»
Uwe Schridde
Director de operaciones
«Habíamos probado realmente todos los faldones laterales posibles, pero ninguno de los productos podía solucionar los problemas de manera definitiva. El desgaste del faldón lateral lo dejaba continuamente fuera de servicio. Esto hacía que se volviese a generar polvo enseguida y se derramase material. Me refiero a varias toneladas cada trimestre. En realidad, el principio del AirScrape es muy simple: funciona sin contacto y, por tanto, sin desgaste. Así pues, desde hace casi 4 años el AirScrape funciona con gran fiabilidad en nuestra transferencia, y mantiene limpia la zona detrás del triturador. ¡Ahora podemos invertir en otras cosas los recursos libres!»